
Este próximo lunes día 15 de junio quedará abierta para el público la senda peatonal y nueva zona de esparcimiento situada en el entorno del Faro de Ajo, municipio de Bareyo (Cantabria). Un entorno natural espectacular presidido por el mar abierto y los acantilados, considerado por muchos y muchas como uno de los paisajes más bonitos de toda la costa cantábrica, especialmente a la hora del atardecer.

Tras décadas y décadas en las que vecinos, visitantes y turistas han denunciado el cierre al público de la finca del Faro y reclamado su apertura como zona de ocio que mantuviera su equilibrio natural, por fin se ha llegado a una solución y a partir del próximo lunes se abrirá al público todo el entorno del Faro, en lo que a buen seguro será un nuevo impulso para la economía turística de nuestro municipio. El hecho de haber mantenido un mínimo equilibrio entre urbanización y entorno es importante de destacar, pues fueron muchos quienes quisieron realizar proyectos que rompían de lleno con ese equilibrio, como el proyecto de parque de esculturas gigantes.

Lo que finalmente habrá será una senda peatonal con vallado de madera de cerca de un kilómetro de longitud, que recorrerá este terreno de aproximadamente 17 hectáreas y que también contará con bancos a lo largo de la senda. Desde este terreno se puede contemplar la impresionante costa de Ajo, incluido el propio Cabo de Ajo -el más septentrional de Cantabria, presidido por su majestuoso faro- o el Cabo Quintrés, una maravillosa panorámica de la Bahía de Santander, gran parte de la Costa oriental de Cantabria e incluso parte de la costa vasca más cercana a Cantabria. La finca permanecerá abierta todo el verano, desde el mismo 15 de junio hasta el 30 de septiembre, en horario de 11 de la mañana a 20 horas de la tarde.

Estos últimos días los operarios se afanaban en ultimar todos los detalles y en dejar todas los tareas concluidas para el día de la apertura. Los costes de estas obras de acondicionamiento del entorno del Faro de Ajo ascienden a 52000 euros, de los cuales el ayuntamiento ha abonado aproximadamente 10000 euros. Desde luego, una inversión de escasa cuantía comparada con la repercusión que esta apertura va a tener en la economía local, por lo que solo queda lamentar lo tarde que llega este acontecimiento.